Luego de una larga pausa y el cuarto campeonato de las Minnesota Lynx, la WNBA está de regreso más fuerte que nunca. Con el partido entre el Phoenix Mercury y las Dallas Wings, este viernes se da el pitazo inicial a la temporada 2018 que será muy especial en cada arena de basquetbol. Luego de más de 20 años, la WNBA puso en marcha el programa “Take a Seat, Take a Stand” con el que se busca empoderar a miles de mujeres con apoyo de la afición.

A partir de este viernes, por cada boleto que se venda de los juegos de la WNBA serán donados $5 dólares a seis organizaciones que defienden los derechos de las mujeres y las niñas. Adicional a esto, serán enviados tickets a una joven para que asista a un partido y sea inspirada por la fuerza que desprenden las jugadoras de la WNBA. Este ambicioso programa busca impulsar el basquet femenil y ayudar a que millones de mujeres levanten su voz para crear un cambio social y que mejor que sea a través del basquet.

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