Los aficionados al basquetbol recuerdan con mucho cariño a los Pistones de Detroit que fueron protagonistas en la primera década del nuevo milenio. Jugadores como Ben Wallace, Rasheed Wallace, Chauncey Billups y Richard Hamilton marcaron a toda una generación que vio como los Pistones doblegaron a los Lakers en las Finales del 2003-04. Existen diversas aventuras vividas por este equipo, la más conocida fue la pelea que tuvieron contra los Pacers en el episodio conocido como Malice at the Palace; sin embargo una de las historias que dejó huella en la duela es la de Rip Hamilton y su legendaria máscara.

Richard Hamilton, una leyenda enmascarada

La intensidad con la que jugaban los Pistons provocó que Richard Hamilton tuviera que visitar al doctor con la nariz rota en varias ocasiones, tres para ser exactos como cuenta en una entrevista hecha por Newsweek hace poco más de una año. “Tras mi primera fractura, el médico me dijo que debía usar una máscara mi respuesta fue clara ‘diablos no, no voy a usar una pieza de plástico en mi rostro’” comentó Rip a la publicación. Para la segunda vez, el doctor le volvió a advertir que debía usar protección y de nueva cuenta se negó. Ya a la tercera fue la vencida, sin pensar que ese momento cambiaría su carrera de por vida.

“¿Sabes qué? Estoy cansado de pasar por el quirófano, estoy cansado de someterme a una cirugía. Estoy cansado de perder juegos» comentó Rip Hamilton a Tim Marcin de Newsweek así que después de la operación consiguió la máscara, a sabiendas de sus posibilidades reales para ganar el campeonato. Es verdad que Richard no fue el primer jugador en usar este accesorio, pero fue quien lo patentó al grado de decir “se convirtió en una especie, como si fuera mi capa de Batman”.

Después de usar la máscara, Rip Hamilton y los Pistons lograron ganar el trofeo Larry O’Brien al imponerse sobre los Lakers en cinco juegos. Hamilton fue una pieza clave de dichas Finales al ser el líder anotador del equipo en dos juegos, el tercero con 31 puntos y el quinto y último con 21 unidades, además su promedio fue puntos fue el más alto de los Pistones con 21.4 por partido. La máscara de Richard se convirtió en una especie de amuleto, mismo que nunca más dejaría en el vestidor. En la actualidad, Rip se mantiene en el mundo del basquetbol como reportero y analista de NBA on TNT, siendo recordado siempre por su legendaria máscara.

FacebookTwitterWhatsAppCopy Link