La historia de la NBA no sería lo mismo sin la presencia de Shaquille O’Neal, un jugador que se convirtió en un ícono de la cultura popular de los noventas y que nos regaló algunas de las más grandes jugadas. Una de las más recordadas por el público fue el día que Shaq destruyó el tablero de los Nets, en una brutalidad que se quedó en la memoria colectiva de los aficionados al basquetbol.

Aquella noche del 23 de abril del 1993, Shaq se plantó en la pintura ante tres adversarios y clavó el balón de una forma tan violenta que el tablero por completo se vino abajo. Ambos equipos tuvieron que irse al vestidor en lo que se intentaba reparar los destrozos ocasionados por Shaquille O’Neal. El partido finalizó con victoria para el Magic por marcador de 119 a 116 con una gran actuación de Nick Anderson que anotó 50 puntos como relevo. Desafortunadamente para Nick, esa noche será recordada por la clavada de Shaq.

ESPN creó una documental para su serie 30 for 30 en la que aborda la historia del Magic en la década de los noventa. En la parte donde recuerdan este suceso en Nueva Jersey, Shaq respondió una de las preguntas que durante años rondaron su carrera ¿Fue intencional esa clavada que destruyó el tablero de los Nets? El grandulón respondió

“Demonios, sí”

 

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