Los Lakers ilusionan a su afición

Antes del inicio de la temporada regular, la NBA preparó un par de platillos fuertes para ir entrando en calor. Lakers y Warriors se vieron las caras por primera vez en esta era LeBron y fue un juego cascarero pero entretenido. Previo al juego, James y Kevin Durant se fundieron en un fuerte abrazo que, dados los últimos rumores en el cuarte de Golden State, desató las sospechas de una posible unión de ambos en un futuro.

Ya en la duela de Las Vegas, los Lakers mostraron que han conjuntado un equipo para generar espectáculo. LeBron James y sus muchachos han mostrado que en poco tiempo han generado buena química, incluso con Lance Stephenson, su rival histórico y con quién ya festeja sus canastas de forma efusiva.

Con un marcador muy cerrado antes de terminar la primera mitad, LeBron James le dio una sopa de su propio chocolate a los Warriors. Contra reloj y de larga distancia, LeBron James anotó un triple que amplió un poco la ventaja para que los Lakers fueran tranquilos al descanso.

Tan sólo bastaron 18 minutos y 10 puntos para que LeBron ponga a soñar con una gran temporada a los aficionados de los Lakers. Fue una segunda mitad dominante para el conjunto angelino que finalizó con una victoria contundente de 123 a 113 a su favor. Además de propinarle su tercera derrota en la postemporada a los Warriors, los Lakers recuperaron a Lonzo Ball y han consolidado a Brandon Ingram como una estrella en ascenso que en esta ocasión anotó 26 unidades

Con marca de dos victorias y tres derrotas, los Lakers ilusionan a su afición luego de este partido que tendrá una revancha inmediata cuando el viernes se vuelva a ver las caras en cierre de la pretemporada de la NBA.