Los reflectores se van sobre las estrellas de la NBA y sobre todo este año donde la clase 2018 estuvo encabezada por grandes nombres pero no olvidemos que la WNBA también sumó dos inmortales más en el Salón de la Fama.
Katie Smith y Tina Thompson entraron ya al recinto de los inmortales, en un acto de reconocimiento y justicia a su gran trabajo durante su paso por la liga femenil.
Para Tina Thompson era cuestión de tiempo, fue parte de a primera dinastía en la WNBA, ganando cuatro campeonatos con las Comets de Houston, nueve veces elegida al Juego de Estrellas, tres veces al Equipo Ideal de la WNBA, la primera selección del Draft de 1997 y por si fuera poco sumó dos medallas de oro en Juegos Olímpicos.
La garra y determinación en la duela hicieron de Katie Smith un emblema de la liga, su intensidad fue clave para guiar al Shock de Detroit a ganar dos títulos de la WNBA, ella fue la Más Valiosa de las Finales en 2008. Tuvo una extraordinaria carrera colegial con las Buckeyes de Ohio State y en el plano internacional obtuvo tres medallas de oro con Estados Unidos en Juegos Olímpicos.
Dos jugadoras fuera de serie que ahora ya tienen un lugar en el Salón de la Fama del Basquetbol, más que merecido el reconocimiento.
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Vía WNBA
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