Los 76ers quieren ser el caballo negro

Confiar en el proceso. La famosa frase de Joel Embiid cada vez toma más sentido cuando los jóvenes de Filadelfia saltan a la duela y muestran la evolución que han tenido durante la presente campaña. Los 76ers recibieron a los Knicks de Nueva York, quienes en ausencia de Kristaps Porzingis la han pasado muy mal, para propinarles un nuevo descalabro, el séptimo de forma consecutiva, tercero sin KP. El juego comenzó con el regreso de Allen Iverson a la duela. The Answer tocó la campana que marca el inicio del partido.

A pesar del liderazgo asumido por Michael Beasley y lo bien asentado que se ve Enes Kanter con el quinteto neoyorquino, los Knicks son cada vez más golpeados en el sector defensivo. Caso contrario, los 76ers han mostrado una cara balanceada en los más recientes partidos, prueba de ello son sus cuatro victorias al hilo. Dario Saric colaboró con 24 unidades, mientras que Embiid se fue a casa con 13 puntos.

El jugador del partido fue T.J. McConnell quien, desde la banca, consiguió un triple doble de 10 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes en el triunfo 108 – 92 de los 76ers. Esta es la primera ocasión que un jugador de Filadelfia consigue dicha hazaña viniendo desde el banquillo de suplentes. Así festejó Embiid a McConnell.

Los 76ers quieren ser el caballo negro esta temporada, se ubican en el séptimo puesto de la Conferencia del Este y van con paso firme a la postemporada de la NBA. Embiid, Simmons y compañía se han vuelto protagonistas de la liga, caso contrario de los Knicks quienes siguen estando en las primeras planas, pero por sus malos resultados.