En Estados Unidos, el último lunes de mayo de celebra el Día de los Caídos que recuerda a todos los soldados fallecidos en combate. Este festejo de carácter federal tiene un significado especial para los Toros de Chicago de Michael Jordan, ya que en dicha fecha lograron dos de sus victorias más importantes en su reinado durante la década de los 90.

Los Bulls de Chicago y el Día de los Caídos comienzan su relación en 1991, cuando liderados por Jordan lograron barrer a los Pistones de Detroit, uno de los equipos más duros de aquel entonces para llegar a las Finales de la NBA y vencer a los Lakers de Magic Johnson.

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Dos años después, en el Memorial Day de 1993, Chicago repitió la hazaña y venció a los Knicks de Nueva York para empatar la serie luego de perder los dos primeros juegos de la Final de la Conferencia del Este. Ese día, el 31 de mayo de 1993, Michael Jordan anotó 54 puntos que sirvieron para darle vida a los Bulls y ganar la serie en seis juegos. Luego de este momento, los Bulls llegaron a la final frente a los Suns de Phoenix misma que ganaron.

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En ambas fechas fueron el inicio y fin del primer tricampeonato de Chicago en la NBA dirigidos por Phil Jackson. Luego del retiro momentáneo de Jordan, los Bulls cedieron el trono a los Rockets de Houston, mismo que recuperaron en la temporada 95 – 96 para repetir el triple anillo de campeón de la NBA.

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