Al inicio de la temporada, muchos postularon a los Mavs como uno de los equipos favoritos para pelear por la cima del Oeste, pero las lesiones y la falta de entendimiento entre los nuevos jugadores hicieron que Dallas tuviera un mal comienzo. El Jazz de Utah es una de las sorpresas de la temporada y estos dos equipos se enfrentaron en acción de jueves por la noche para dar un juegazo.

El Jazz de Utah tuvo una buena pegada que los llevó a estar hasta 21 puntos arriba en el partido, pero no tuvieron la energía necesaria para mantener el paso y para la segunda mitad se desmoronaron. Dirk Nowitzki, como si fuera un quinceañero, recuperó un rebote ofensivo después de un tiro fallado por Harrison Barnes y disparó para empatar el partido a 100 con menos de 3 segundos en el reloj.

El momento ayudó a que los tejanos tuvieran el control del partido y al final los Mavericks vencieron a Utah 112 – 105 en partido cardiaco que juntó a dos generaciones de basquetbolistas: la experiencia de los Mavs y la juventud del Jazz. A pesar de la derrota, el conjunto de Utah marcha 4to del Oeste, mientras que Dallas se encuentra en el onceavo peldaño con algunas esperanzas de colarse a la postemporada.

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