Está semana se anunciaron los próximos integrantes al Salón de la Fama del baloncesto; Yao Ming, Shaquille O’Neal y Allen Iverson son los nombres que resaltan en la lista. Todos a mi parecer tienen los méritos necesarios para ser parte de las leyendas del basquetbol profesional, Shaq es el más vigente a la fecha en los medios de comunicación, mientras que Yao ha desaparecido poco a poco de los reflectores. A lo que voy es que me da mucha alegría ver a Iverson dar el paso que en su carrera como profesional le faltó para convertirse en una estrella.

Como millenial, un término bastante burdo para definir una generación, Allen Iverson representa la cultura callejera de los años dosmiles, que estuvo plagado de rap y trenzas. Con los brazos repletos de tatuajes, representa el último bastión de jugadores callejeros, de esos que podrías encontrar en algún parque de los suburbios de las ciudades marginadas de los Estados Unidos.

Allen Iverson al Salón de la Fama por Viva Basquet

Los números nunca le harán justicia al gran legado que dejo dentro y fuera de la duela, su contrato con Reebok trajo un icono de los sneakers: Question. En esa época usar un par de tenis de los que usaba Iverson imponía respeto en la calle, se convirtió en un modelo a seguir por su forma de vestir. Lástima que en su época no existía tanta difusión con la que existe hoy; tal vez nunca veamos otro personaje como el en la NBA.

Ahora es común ver a los jugadores llegar cargados de SWAG a sus entrenamientos y partidos, contratos millonarios para crear sneakers carísimos que demuestran la falta de identidad en muchas de las estrellas. Allen representa el verdadero lujo de la calle, gorras de equipos béisbol de lado, pañuelos en la cabeza, joyas, muchas joyas colgando de su cuello.

Allen Iverson al Salón de la Fama por Viva Basquet

He dado pocos argumentos deportivos del porque es digno del Salón de la Fama, nunca ganó un trofeo Larry O’Brien, fue Novato del Año en la NBA y en alguna ocasión MVP de la temporada. Un jugador que salió por la puerta de atrás de la liga, al cual no se le dio justo valor, pero para los 76ers se convirtió en un referente de un equipo modesto que en los últimos años se encuentra sumido en un bache.

La inclusión de Allen Iverson al Salón de la Fama es una consideración por parte de la NBA después de todo lo que entregó al deporte. El año pasado el rapero Post Malone lanzó al mercado “White Iverson” un track con referencias al número 3 de Phily que rinde un pequeño homenaje a un basquetbolista que lo dio todo en la cancha y que como Post Malone menciona en la canción “necesito el dinero, así como el anillo que nunca gané”.

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